Una juez federal ha negado la libertad provisional al capitán primero José Martínez Crespo y al sargento segundo de Infantería Fabián Pirita Ochoa, quienes están siendo procesados por su presunta participación en la desaparición de los 43 normalistas de Ayotzinapa. La decisión fue tomada por Raquel Duarte Cedillo, juez segundo de Distrito en Materia Penal de Toluca, Estado de México, quien consideró que existe un riesgo significativo de fuga.
En las audiencias celebradas entre el 30 de noviembre y el 8 de diciembre, la juez desestimó los argumentos presentados por la defensa, que incluyeron cartas firmadas por el ex Presidente Andrés Manuel López Obrador. Estas cartas afirmaban que no se habían encontrado pruebas que vincularan al Ejército con la desaparición de los estudiantes y responsabilizaban a los abogados de los deudos por la liberación de posibles implicados.
Duarte Cedillo argumentó que el capitán Martínez Crespo no había demostrado un arraigo familiar o domiciliario suficiente para reducir el riesgo de fuga. Además, se mencionó la falta de información sobre el bloqueo de sus cuentas bancarias, que mostraban depósitos acumulados de entre 400 mil y 700 mil pesos.
En el caso del sargento Pirita, la juez basó su decisión en una evaluación de riesgos de la Guardia Nacional, que indicaba una alta posibilidad de evasión de la justicia, también debido a su falta de arraigo.
Ambos militares están acusados, entre otras cosas, de intentar llevarse a los estudiantes del Hospital Cristina la noche de la desaparición en Iguala, bajo órdenes supuestamente giradas por mandos de los 27 y 41 Batallones de Infantería, en colaboración con el grupo criminal Guerreros Unidos.
Desde el inicio de las investigaciones en 2022, se han emitido órdenes de aprehensión contra 20 militares, de los cuales 16 han sido detenidos y 15 vinculados a proceso. Solo uno ha quedado en libertad por falta de pruebas. Actualmente, el capitán Martínez Crespo, el sargento Pirita y el soldado de Primera Francisco Narváez Pérez son los únicos que permanecen detenidos en el Campo Militar Número 1, mientras que varios soldados continúan prófugos.