El ser humano no sólo es el peor enemigo de sí mismo, también del planeta. A pesar de las consecuencias visibles como calentamiento global y pérdida de la biodiversidad de especies, diario se realizan acciones que siguen incrementando dichos problemas.
Recientemente se dio a conocer que la deforestación de la selva amazónica de Brasil alcanzó este año su nivel más alto en una década debido a la tala ilegal y a la invasión de agricultura.
De acuerdo con información de Reuters, entre agosto del 2017 y julio de este año se talaron 7 mil 900 kilómetros cuadrados de boque, un 13,7% más respecto al mismo período del año anterior, cuando alcanzó los 6 mil 947 kiñómetros.
La deforestación es un factor clave detrás del calentamiento global, ya que equivale alrededor de un 15% de las emisiones anuales de gases que atrapan el calor, lo mismo que el sector del transporte.
El ministro brasileño de Medioambiente, Edson Duarte, dijo que la tala ilegal es el factor principal detrás del aumento de la deforestación e hizo un llamado al Gobierno para aumentar la vigilancia policial en la selva amazónica.
Los estados de Acre, Pará, Mato Grosso, Rondonia y Amazonas son los que mayor cantidad de bosque han perdido durante el período analizado.
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