La Iglesia católica en México hizo un llamado este domingo a fomentar el diálogo como una herramienta esencial para sanar las divisiones y reconstruir el tejido social en un país marcado por la inseguridad y la violencia. En su editorial del semanario “Desde la Fe”, la institución subrayó la importancia de establecer conversaciones sinceras y constructivas entre todos los sectores de la sociedad, incluyendo el gobierno, la sociedad civil y otras iglesias.
El texto destaca la reciente participación de la presidenta de México, Claudia Sheinbaum, en la 117 Asamblea Plenaria de la Conferencia del Episcopado Mexicano (CEM), donde se llevó a cabo un diálogo abierto y respetuoso con los obispos del país. Este encuentro fue calificado como un “gesto significativo” que permitió abordar preocupaciones urgentes en áreas como migración, medio ambiente, educación y, sobre todo, seguridad.
Monseñor Ramón Castro, presidente de la CEM, describió el encuentro como un signo de esperanza, señalando que se han “tendido puentes” para abordar los problemas críticos que enfrenta México. En este contexto, los obispos presentaron un compendio de declaraciones y exhortaciones sobre justicia y paz, reflejando su compromiso continuo por iluminar el camino hacia una sociedad más equitativa.
La editorial también reiteró una postura crítica hacia las estrategias de seguridad implementadas en el país, enfatizando que la reconstrucción del tejido social es fundamental para lograr una paz justa y duradera. En este sentido, la Iglesia se comprometió a ser “artesanos de paz”, priorizando el diálogo como eje de trabajo para el bienestar común.
“Desde nuestra identidad como peregrinos de esperanza, caminamos junto a quienes sufren y nos esforzamos por ser una Iglesia en salida, abierta a todos los sectores”, afirmaron, invocando a que el diálogo sea la guía para construir el México que todos desean.
