En su primera intervención en el pleno de la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN), la ministra Lenia Batres generó polémica al evidenciar su falta de claridad sobre la vigencia de las suspensiones provisionales y definitivas durante la discusión por la contradicción de criterios 523/2019. Este hecho le valió críticas de expertos en redes sociales.
El proyecto del ministro Luis María Aguilar proponía considerar válido iniciar una queja cuando la autoridad responsable incumple con una suspensión provisional, incluso si se dicta una suspensión definitiva. La ministra Batres expresó su oposición, argumentando contra el criterio del ministro Aguilar Morales.
En sus palabras, la ministra cuestionó la posibilidad de dar efecto a una queja basada en una suspensión provisional contradictoria a una suspensión definitiva. Calificó de “absurdo” que un juez sancione a autoridades que no cumplen con una suspensión provisional cuando una suspensión definitiva se dicta en sentido contrario.
En redes sociales, abogados criticaron a la ministra por desconocer las reglas del juicio de amparo, donde el juez concede primero una suspensión provisional para evitar efectos irreparables y, si la demanda tiene méritos, concede la suspensión definitiva.
Tras la intervención de la ministra Batres, la ministra presidenta Norma Piña Hernández se posicionó en contra del proyecto, argumentando sobre la falta de propósito en impulsar el cumplimiento de una suspensión provisional ya no jurídica ni materialmente posible.
El ministro Luis María Aguilar defendió su proyecto, asegurando que se puede sancionar el desacato de una suspensión provisional, aunque ya no se pueda exigir el cumplimiento debido a la existencia de una orden con la suspensión definitiva. A pesar de la oposición de la ministra Batres, el proyecto fue aprobado por mayoría de nueve votos.
