La Secretaría de Salud (Ssa) ha presentado el Plan de Gestión a Largo Plazo para el control de COVID-19, resaltando la importancia de incluir la inmunización contra el coronavirus en el Programa de Vacunación Universal. Además, se descarta la necesidad de desarrollar nuevos biológicos para combatir la enfermedad.
Según el subsecretario de Prevención y Promoción de la Salud, Hugo López-Gatell Ramírez, las vacunas existentes contra el virus SARS-CoV-2, incluyendo las formuladas para las variantes originales y sucesivas, ofrecen protección contra formas graves de la enfermedad e incluso la muerte, respaldado por la Organización Mundial de la Salud (OMS).
López-Gatell Ramírez desestimó las afirmaciones de grupos de interés y medios corporativos que han promovido la necesidad de nuevas vacunas bivalentes, ya que carecen de fundamentos científicos.
El plan destaca que el comportamiento del coronavirus será similar al de la influenza, con un aumento de casos durante la temporada invernal. Se espera que el virus tenga una ocurrencia periódica, al igual que más de 450 virus respiratorios que continúan afectando a los seres humanos.
Además, el Plan de Gestión enfatiza la importancia de mantener la capacidad nacional de respuesta a eventos epidemiológicos futuros y fomentar la participación tanto del gobierno como de la sociedad en la conversión, reconversión e intercambio de servicios hospitalarios.
El Plan de Gestión también hace hincapié en que el uso generalizado de cubrebocas solo debe ocurrir durante una emergencia sanitaria, reservándose para personas con síntomas respiratorios o enfermedad confirmada, así como en situaciones de alto riesgo de contagio.
Además, se advierte sobre el uso excesivo de cubrebocas, ya que puede tener efectos negativos como dolores de cabeza, problemas en la piel, acné, dificultad para respirar, dolor de garganta, ojos secos, problemas cognitivos y aumento de la sudoración alrededor de la boca.
La Secretaría de Salud enfatiza la necesidad de comunicar adecuadamente la importancia del uso del cubrebocas para prevenir infecciones respiratorias y el riesgo real de contagio que se corre al no utilizarlo. Esto evitará subestimar o sobrestimar el riesgo y garantizará la adopción de otras medidas de prevención igualmente importantes, como la higiene de manos, el distanciamiento social y la ventilación adecuada de los espacios.
