El aspirante priista a la Jefatura de Gobierno de la Ciudad de México, Mikel Arriola, se considera un “liberal” en lo económico y político, así como un creyente de la democracia y de que las políticas públicas se diagnostican, se planean, se aplican y se les da seguimiento para que sirvan a los ciudadanos.
Así lo manifestó el exdirector del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS), en entrevista con Pascal Beltrán del Río en Imagen Radio, y agregó que respeta los derechos que se han ganado en la Ciudad de México, referente a los matrimonios igualitarios y a la interrupción legal del embarazo.
Tengo la oportunidad es de acompañar a los ciudadanos para transformar sus propuestas en políticas públicas. Soy un ciudadano, no queremos estructuras clientelares y formaremos redes precisas”, comentó Arriola.
El exfuncionario federal afirmó que del resto de los aspirantes, él es quien “menos negativos tiene” y que es un conocedor de los problemas de la ciudad.
Arriola dijo que como no militante, su compromiso es sumar al PRI y dijo que tomará en cuenta toda la estructura del partido en la Ciudad de México, incluso a Cuauhtémoc Gutiérrez, integrante del Consejo Político del partido, acusado en 2014 de encabezar una red encargada de reclutar mujeres para prestarle servicios sexuales, cuando fue presidente del partido en la capital.
Sumaremos a todas las estructuras. Queremos un partido unido, en el que trabajemos juntos. El PRI no requiere esas viejas clientelas que deciden por los ciudadanos, no sirven a la gente, se sirven de la gente”, indicó.
Arriola consideró que la Ciudad de México no es de “izquierda”, que la ciudadanía está ávida de propuestas inteligentes y, de sus posibles contrincantes, Claudia Sheinbaum y Salomón Chertorivski, dijo que merecen todo su respeto.
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