En la sierra del municipio del Rosario, elementos del Octavo Batallón de Infantería y de la Cuarta Zona Naval, con sede en Mazatlán, se sumaron a los operativos de vigilancia para combatir a grupos delictivos y restablecer la tranquilidad, sobre todo en la comunidad de la Rastra.
Durante el pasado mes de abril, familias de los poblados del Azafrán, La Rastra y las Negras abandonaron sus hogares, ante la presencia de personas armadas, por lo que se instaló una Base de Operación Mixta, con 100 agentes estatales de Durango y Sinaloa.
Cristóbal Castañeda Camarillo, Secretario de Seguridad Pública del Estado, dijo que se mantienen recorridos por la sierra del Rosario, en donde se tiene contacto con sus habitantes, para conocer la situación y hacer sentir su presencia.
Dio a conocer que por tierra y aire se realizan reconocimientos continuos, a los que se han sumado elementos del ejército y de la Marina, como parte de una estrategia para recuperar la tranquilidad y garantizar a las familias que han retornado a sus hogares, la seguridad.
Castañeda Camarillo manifestó que como acción adicional, la Secretaría de Desarrollo Social distribuyó despensas alimentarias entre los pobladores, con los que se tiene intercambio de impresiones y se les hace sentir que se mantendrá la vigilancia por tiempo indefinido.
La semana pasada, los diputados locales, miembros de las Comisiones de Seguridad y Justicia del Congreso del Estado expusieron que en quince poblados de la sierra del Rosario, se tenían reportes de la presencia de grupos armados que colocaban retenes.
El presidente de la Comisión de Seguridad Públicas, diputado local petista Mario Rafael González Sánchez dio a conocer que se solicitó con carácter urgente, al titular de la Secretaría de Seguridad Pública, Cristóbal Castañeda Camarillo actuar en la sierra del Rosario.
Comentó que vecinos de las comunidades como, El Aguaje, Las Cebollitas, El Corral, El Charco Hondo, Buena Vista, Guamuchitita, Jalpa, Maloya, Las Negras, El Potrero de los Laureles, la Rastra y Matatán solicitaban ayuda, puesto que escaseaba alimentos.
La versión del legislador local fue que la presencia de grupos armados, impedían el transporte de alimentos en las partes altas, por lo que 69 familias se habían desplazado a las partes bajas, por temor a ser víctimas de la violencia.
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