El dirigente nacional de Morena, Mario Delgado, reconoció que en su partido aún persiste una dinámica de desgaste por parte de quienes no han cobrado conciencia de que cualquier disputa interna beneficia a los adversarios.
En entrevista con Excélsior, consideró que las inconformidades por las candidaturas a gobernadores también vulneran el proyecto de la Cuarta Transformación, toda vez que el partido necesita obtener, el próximo 6 de junio, el mayor número de posiciones y, sobre todo, remarcó, ganar la mayoría en la Cámara de Diputados.
“Entonces, aquellos inconformes de Morena que deciden renunciar para irse a otro partido, el que sea, pues no ayudan al proyecto de la Cuarta Transformación, se vuelven nuestros adversarios políticos y en ese campo nosotros vamos a trabajar, porque no nos resten y porque garantizaremos los triunfos”, señala.
Desde la campaña por la dirigencia del partido, el exjefe de la bancada morenista en la Cámara de Diputados se ha caracterizado por evitar los comentarios sobre el evidente fuego amigo que entonces hubo contra su postulación y que ahora golpetea su gestión a través de manifestaciones contrarias en sus giras a los estados y en la misma sede partidista.
Cuestionado sobre cómo le va con esta división entre puros y moderados y si lograron montarle un caballo de Troya al interior de Morena para minar su dirigencia, Delgado Carrillo mide las palabras de su respuesta. Pero ante la insistencia de que fije postura sobre una situación de evidente pugna interna, plantea:
“Hubo dos años de vacíos, de disputas, de falta de organización que son muy visibles. Pero estamos poniendo todo nuestro empeño en reorganizar a nuestro partido, y actuando con absoluta honestidad e imparcialidad y buscando la unidad”.
El presidente de Morena sube el tono al admitir que el golpeteo persiste y alerta que este “tratar de continuar, de manera velada, lo que fue la
disputa por la dirigencia, pues no es algo que me desgaste a mí en lo personal, el desgaste va directo para nuestro partido y a sus posibilidades en la contienda electoral”.
Lamenta que en Colima el Partido del Trabajo prefiriera ir con el PVEM y no sumarse a la abanderada morenista a la gubernatura, Indira Vizcaíno, “pues ésa va a ser una candidatura funcional al actual gobierno estatal (del PRI) y no para que ganemos al estado, a pesar de que a nivel nacional claramente tenemos una alianza muy fuerte”.
Exsenador y exsecretario de Finanzas y de Educación en el gobierno capitalino de Marcelo Ebrard, el presidente de Morena espera que los militantes y abanderados de su partido dejen atrás los años de conflictos que se judicializaron en los tribunales y confía en que la nueva Comisión de Honestidad y Justicia pueda dirimir las riñas internas.
En el caso de los reclamos en contra de la candidatura de Félix Salgado Macedonio al gobierno de Guerrero por presuntos casos de violencia sexual, Delgado Carrillo sostiene que actuarán conforme a los principios de Morena y serán “muy cuidadosos” porque en tiempos electorales “es normal que haya muchos ataques políticos”.
Sostiene que no habrán de subestimar ninguna acusación, pero reitera que “tampoco nos podemos volver juzgadores sin tener elementos”.
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