El impacto del Covid-19 en la economía mexicana se definirá por el nivel de contención de contagios que muestren las 32 entidades del país, el cual precisa cómo avanzará el plan de reapertura de las actividades económicas y sociales.
De acuerdo con el semáforo de propagación del coronavirus, que realizó el gobierno federal y se actualizará semanalmente, con datos al cierre del 12 de mayo, 13 entidades se ubican en un nivel de alerta máxima: Ciudad de México, Estado de México, Tabasco, Campeche, Morelos, Sinaloa, Tlaxcala, Baja California, Hidalgo, Yucatán, Guerrero, Baja California Sur y Quintana Roo.
El nivel de alerta máxima, que es el semáforo rojo, sólo incluye actividades esenciales (ya están fabricación de equipo de transporte, construcción y minería) y la continuación del aislamiento social, es decir, paralización económica.
Los territorios referidos representan 44.3% del Producto Interno Bruto (PIB) nacional, 44.9% de la Inversión Extranjera Directa (IED) registrada en el país entre 1999 y el 2019 que ascendió a 578,018 millones de dólares y 41.7% de los trabajadores asegurados en el IMSS al corte de abril (19.9 millones de personas en México).
Lo anterior significa que si estas entidades no cambian de color de semáforo antes del 1 de junio, cuando termina la jornada nacional de sana distancia y entra en vigor el sistema de semáforo para la reapertura de actividades sociales, educativas y económicas, las consecuencias para la economía mexicana se agravarán más. Cabe recordar que del 18 al 31 de mayo es la etapa de preparación del plan de “nueva normalidad”.
En el nivel de alerta alto de la propagación del virus, que es el semáforo naranja, se colocan Michoacán, Nayarit, Veracruz y Puebla, que significan 11.2% del PIB nacional, 7.7% de la IED y 9.8% de los empleados formales.
En todos los niveles de aplicarán medidas de higiene y de sana distancia. La diferencia en este color de semáforo es que además de las actividades esenciales, las no esenciales, con capacidad operativa reducida, entran a escena; asimismo, se reabre el espacio público abierto, con baja aglomeración, lo cual incentiva el consumo. También, las personas vulnerables, deberán tener un máximo cuidado.
En tanto, Tamaulipas, Sonora, Aguascalientes y Oaxaca son los estados en el nivel de alerta media (semáforo amarillo). Su importancia es la siguiente: 9.3% del PIB nacional, 9.3% de la captación de capital extranjero y 9.2% de los trabajadores dados de alta en el IMSS.
En este semáforo ya están todas las actividades esenciales y no esenciales; se abren los espacios públicos abierto y cerrado (ambos con capacidad reducida), y las personas vulnerables deben presentar un cuidado medio.
La esperanza
Por último, 11 entidades están en el nivel de alerta bajo (semáforo verde, donde se reactivan todas las actividades sociales, educativas y económicas): Chiapas, Colima, Zacatecas, Jalisco, Durango, San Luis Potosí, Chihuahua, Querétaro, Guanajuato, Coahuila y Nuevo León.
Dichos estados, en conjunto, juegan un papel importante en México, ya que ostentan 35.2% del PIB nacional, 38.1% de la IED y 39.4% de los trabajadores asegurados. Es decir, si se denotan a estas entidades, desde la Federación y con el apoyo estatal, la caída de la economía mexicana al cierre del año podría ser menos abrupta (calculan que sea mayor a -6 por ciento).
Destaca que en este grupo de estados se encuentran integrantes del Bajío, a excepción de Aguascalientes (amarillo) e incluyendo a Jalisco por la alianza regional que toma forma, motor económico en el sexenio federal pasado.
Fuente: https://www.eleconomista.com.mx