La presidenta de México, Claudia Sheinbaum, anunció que el país hará una entrega inmediata de agua al estado de Texas, sin precisar fechas ni cifras concretas. El ofrecimiento, según explicó, fue planteado desde el pasado miércoles, un día antes de que el expresidente estadounidense Donald Trump amenazara a México con la imposición de aranceles por el presunto incumplimiento en la entrega del líquido vital destinado a agricultores texanos.
“Quizá no lo conocía el Presidente Trump: ha habido ya mesas de trabajo. Incluso el día anterior, o sea, antes de ayer (el miércoles), se había enviado una propuesta de cuánta agua puede entregar México en distintos lugares de manera inmediata”, explicó Sheinbaum durante una declaración ante medios.
La mandataria aclaró que la propuesta enviada a Estados Unidos incluye un análisis sobre la disponibilidad actual de agua y una estimación basada en la temporada de lluvias de este año, lo que podría permitir mayores entregas en el segundo semestre.
Según lo expuesto, el volumen de agua que México se compromete a entregar será determinado conforme a la disponibilidad en el Río Bravo, afectado por casi cuatro años de sequía en la región. Este fenómeno ha reducido significativamente el caudal del río, lo que ha complicado el cumplimiento del Tratado de Aguas de 1944 entre ambos países.
Sheinbaum minimizó la amenaza de Trump sobre la imposición de nuevas tarifas, señalando que se trata de su conocida forma de negociar. “Es una propuesta muy razonable y que tiene que ver con la disponibilidad de agua. A los agricultores de Texas, que son quienes están pidiendo el agua, va a haber una entrega inmediata de un número determinado de millones de metros cúbicos”, añadió.
Asimismo, aseguró que continúan activas las mesas de trabajo entre autoridades de ambos países para garantizar una solución técnica que permita cumplir con el acuerdo binacional.
