El gobierno mexicano está considerando aumentar los aranceles a las importaciones provenientes de China como parte del proyecto del Presupuesto 2026, medida que busca proteger a la industria nacional ante la competencia de productos chinos más baratos. Esta iniciativa también responde a una demanda persistente del expresidente de Estados Unidos, Donald Trump, quien ha insistido en que México limite la entrada de mercancías chinas para ayudar a controlar el déficit comercial bilateral.
El aumento de aranceles incluiría productos como automóviles, textiles y plásticos, sectores donde la competencia china ha crecido considerablemente en los últimos años. México se ha convertido en un mercado importante para vehículos chinos, siendo uno de los destinos principales gracias a sus precios accesibles y garantías atractivas, lo que ha generado preocupación en la industria local.
La propuesta forma parte de un plan presupuestario que busca fortalecer la recaudación fiscal y controlar el déficit público, al tiempo que impulsa la producción nacional mediante proyectos industriales y apoyo al sector manufacturero. Este ajuste arancelario debe ser aprobado por el Congreso, donde el partido en el poder y sus aliados cuentan con mayorías suficientes para su validación.
Además, esta política se enlaza con las negociaciones para revisar el tratado de libre comercio que México tiene con Estados Unidos y Canadá, con miras a proteger el empleo y la manufactura regional frente a las importaciones subsidiadas. La medida también coincide con los esfuerzos conjuntos para combatir el narcotráfico y fortalecer la seguridad en la región, buscando mantener un equilibrio comercial y político entre las naciones involucradas.
Esta posible alza en los aranceles forma parte de una estrategia más amplia para lograr una “Fortaleza de Norteamérica”, que limite la entrada de productos chinos y favorezca una mayor integración económica entre México, Estados Unidos y Canadá. Aunque falta definir los detalles finales y las tarifas específicas, el gobierno mexicano muestra disposición para responder a estos retos económicos y proteger su mercado interno de los efectos adversos de la competencia internacional.
