En México, sin embargo, el alza ha sido del 54.8 por ciento. De hecho, se han producido allí prácticamente cuatro mil 500 decesos por cada millón de habitantes más de los que se podían esperar si no hubiera irrumpido la pandemia frente a apenas dos mil en el conjunto de la organización.

Las 290 mil muertes oficialmente atribuidas a la COVID en ese país, en cualquier caso, significan menos de dos mil fallecimientos por cada millón de habitantes, un contraste que según precisa a EFE Federico Guanais, uno de los autores del informe, se explica porque en México se hacen muchos menos test.

Es decir, que hay una parte significativa de los fallecimientos que se han producido desde 2020 que también se deben al coronavirus aunque no hayan sido detectados como tales.