Este miércoles se cumplen 10 días en que Colima entró en una crisis de seguridad pública, convirtiendo al estado en el campo de batalla entre agrupaciones criminales.
Los enfrentamientos en la vía pública han arrojado un saldo de 24 personas asesinadas, cinco viviendas agredidas a balazos y cinco vehículos quemados.
La Fiscalía General de Colima ha confirmado que por estos hechos han sido detenidas hasta el momento 11 personas.
La escalada de violencia en Colima se originó el pasado 25 de enero cuando un grupo de internos del Centro de Reinserción Social en Colima, se enfrentaron entre ellos dejando como saldo nueve personas asesinadas.
Algunos de ellos por disparos de arma de fuego en posesión de los internos, otros más por lesiones hechas por objetos punzocortantes y otros por contusiones en diversas partes del cuerpo.
Dos semanas después, el enfrentamiento continuaría ahora en las calles de Colima. El pasado 7 de febrero se inició una batalla campal entre asociaciones delictivas, el primer hecho fue la agresión a una vivienda en la que se encontraron cerca de 200 casquillos percutidos.
Así iniciaría la guerra entre criminales, hecho que fue confirmado por la gobernadora de Colima el pasado 10 de febrero:
En recientes fechas, se han dado una serie de enfrentamientos entre al menos, dos organizaciones criminales. Grupos que, según información de inteligencia, hasta hace poco eran aliados, y han comenzado una disputa interna”.
De esta forma iniciarían días de terror para los colimenses, quienes han preferido resguardarse en sus casas.
A mí en lo particular me tocó a dos cuadras escuchar los tiroteos, sí se siente riesgo, el estar en tu casa y escuchar los tiroteos, va pensar uno que le va tocar a uno pues una bala perdida o algo”, dijo Moisés Guerrero, joven habitante del estado de Colima.
