MRS / Revista Punto de Vista / 27 de Febrero 2024
En los últimos años, la Universidad Autónoma de San Luis Potosí (UASLP) ha experimentado una tendencia preocupante en el QS World University Rankings, elaborado por la prestigiosa compañía británica Quacquarelli Symonds. De 2021 a la fecha, la institución ha descendido 10 lugares, planteando interrogantes sobre las causas detrás de esta disminución en su posición a nivel internacional.
En 2021, la UASLP ocupaba el lugar 17 a nivel nacional en este reconocido ranking. Sin embargo, desde la asunción de Alejandro Zermeño Guerra como rector en ese mismo año, la universidad ha enfrentado una trayectoria descendente constante. En el 2022 cayó al puesto 21, en 2023 descendió aún más hasta el lugar 23, y en la última edición de 2024, se encuentra en la posición 27.
Este descenso plantea interrogantes significativas sobre los factores que podrían estar afectando la calidad y reputación de la UASLP a nivel internacional. ¿Se trata de problemas estructurales, cambios en las políticas institucionales, o desafíos económicos que han afectado su capacidad para ofrecer una educación de calidad?
Es fundamental analizar las causas subyacentes detrás de esta caída, ya que la posición en rankings internacionales no solo refleja la calidad académica de una institución, sino que también puede tener repercusiones en la atracción de estudiantes y profesores internacionales, así como en la colaboración con otras universidades de renombre.
La administración de la UASLP y sus líderes deben abordar estos desafíos con transparencia y acción. La comunidad universitaria, incluidos estudiantes, profesores y personal, merece una explicación clara sobre las estrategias que se están implementando para revertir esta tendencia y mejorar la posición de la universidad en el ámbito internacional.
Es imperativo que la UASLP identifique áreas de mejora y fortalezca sus programas académicos, investigación y proyección internacional. Además, la colaboración con otras instituciones educativas y la participación activa en redes académicas globales pueden ser clave para elevar la reputación y visibilidad de la universidad.
No obstante, es crucial no perder de vista que los rankings, si bien proporcionan una medida de referencia, no capturan todos los aspectos de la calidad educativa. La UASLP ha desempeñado un papel importante en la formación de profesionales y la generación de conocimiento a nivel local y nacional, y estos logros no deben subestimarse.
La caída de la UASLP en el QS World University Rankings es una llamada de atención para la comunidad educativa y las autoridades. Es el momento de evaluar críticamente las prácticas y políticas institucionales, trabajar en áreas de mejora y, sobre todo, preservar y fortalecer el compromiso con la excelencia académica. La educación superior es un componente fundamental del desarrollo social y económico, y la UASLP tiene la responsabilidad de asegurar que continúe desempeñando un papel destacado en la formación de las generaciones futuras.
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