En una declaración polémica, el ex presidente Vicente Fox expresó su deseo de que Xóchitl Gálvez gane la Presidencia en 2024 para que le devuelva su pensión y seguro médico mayores, además de eliminar los programas sociales que él considera “para güevones”. Sin embargo, legisladores de oposición rápidamente enmendaron sus comentarios.
Los coordinadores del PRI y PRD en el Senado, Manuel Añorve y Miguel Ángel Mancera, aclararon que los programas sociales están protegidos por la Constitución y que no hay posibilidad de eliminarlos, así como tampoco de regresar las pensiones a los ex presidentes. Además, enfatizaron que Fox no tiene influencia en el Frente Amplio por México.
En respuesta, los diputados de Morena y PT, Hamlet García Almaguer y Reginaldo Sandoval Flores, acusaron a la oposición de pretender regresar a un gobierno de privilegios y enriquecimiento ilícito. García Almaguer sugirió irónicamente que Fox debería pedir trabajo a la presidenta de la Corte para obtener ingresos.
Reginaldo Sandoval añadió que fue durante el sexenio de Fox cuando Xóchitl Gálvez habría amasado su fortuna mediante contratos para sus empresas, insinuando que el ex presidente ahora le pasa la factura.
Por otro lado, el ex gobernador de Baja California, Ernesto Ruffo, uno de los promotores de Gálvez, minimizó las declaraciones de Fox y afirmó que no influirán en el respaldo ciudadano a la candidata.
El PAN se deslindó de las declaraciones de Fox, subrayando que su plataforma electoral 2024 propone la continuidad y consolidación de los programas sociales. Reconocieron que estos esquemas han sido parte de la política social durante 24 años y que su partido creó algunos de los más efectivos. Afirmaron que buscarán resolver problemas de transparencia e imparcialidad en los programas y fortalecer los derechos fundamentales de los ciudadanos.