Otra familia en Reynosa fue emboscada y asesinada

Al menos tres personas de una misma familia fueron asesinadas durante una emboscada en Reynosa, Tamaulipas. Presuntamente, el ataque ocurrió el sábado por la noche en el ejido Plan de Alazan Tercera Sección, cerca del ejido Congregación Garza conocido como “El Charco”.

La familia regresaba a su comunidad tras haber asistido a un bautizo, cuando fue emboscada por presuntos miembros del crimen organizado. Los atacantes dispararon contra las dos camionetas en las que viajaban las víctimas. Aunque intentaron evadir el ataque, uno de los vehículos se quedó en el camino luego de que el conductor perdiera el control y chocara contra un árbol.

El segundo carro logró llegar a la comunidad y ponerse a salvo. Sin embargo, como resultado de la emboscada murieron tres personas, entre ellas un menor de 14 años de edad. A ello se suman los cuatro heridos de los que informaron las autoridades locales.

El Centro de Control, Comando, Comunicaciones y Cómputo (C4) de este municipio movilizó unidades de emergencia y desplegó un fuerte operativo policíaco. Elementos de la Policía Estatal Acreditable (PEA), arribaron al lugar donde quedó la primera camioneta baleada, encontrando los cadáveres de tres personas.

Los heridos fueron llevados al Hospital Materno Infantil para su atención, en tanto que la escena del crimen fue resguardada por elementos de la Policía Federal y estatal, quienes acompañaron al personal de la Unidad Regional de Servicios Periciales.

Hasta el momento se desconoce la identidad de la familia atacada, sin embargo, el ejido donde ocurrió el ataque se ubica en una zona muy golpeada por el crimen organizado. Tan solo el lunes pasado, cuatro viviendas fueron quemadas y las familias tuvieron que huir tras ser amenazadas.

Similitudes con el caso LeBarón

El ataque contra esta familia en Reynosa tiene grandes parecidos con lo ocurrido con la familia LeBarón, que fue emboscada y acribillada el 4 de noviembre en la localidad de La Mora. Se trató de tres camionetas en las que viajaban mujeres con hijos. En una de las unidades viajaba Rhonita María Miller y sus cuatro hijos. En otra, Dawna LeBarón y sus siete hijos, y en la tercera una mujer de nombre Cristina con su único bebé.

Las tres mujeres fueron interceptadas por un grupo armado. Atacaron la camioneta donde viajaba Rhonita y sus cuatro pequeños, la cual explotó al recibir impactos de bala en el tanque de gasolina.

Después, los hombres secuestraron los otros dos vehículos y se llevaron a los ocupantes. Horas más tarde se dio a conocer que uno de los menores escapó y pidió ayuda en un poblado cercano, confirmando la muerte de otras dos mujeres y dos niños. El número de muertes por este ataque fue de nueve personas.

La entidad, de más de 3.000.000 de habitantes permanece en constante guerra, bajo el control del Cártel del Golfo, y enzarzado en una demencial lucha contra el Cártel del Noreste. Hay días en que los sicarios cortan los principales accesos y las autoridades piden a los vecinos que no salgan de las grandes avenidas.

Con más de 1.100 homicidios dolosos de enero a septiembre de este año, Tamaulipas es para muchos una tumba abierta y todos viven amenazados por el narco. Persecuciones, balaceras y narcobloqueos son algunas de las cosas que se viven constantemente el estado norteño.

Los altos índices de violencia han provocado que el propio gobernador del estado, Francisco Javier García Cabeza de Vaca, catalogara como “narcoterrorismo” los crímenes cometidos por el crimen organizado en Tamaulipas.

“Hay situaciones que se están generando de violencia, como se han suscitado aquí (Nuevo Laredo). Es el comportamiento de criminales que quieren de alguna manera provocar el caos, el pánico, la inseguridad a través de actos de violencia, sobre todo promoviendo el miedo y el terror. Su comportamiento es de narcoterrorismo” dijo el funcionario el 21 de noviembre.

Fuente: AGENCIAS

Salir de la versión móvil