Ovidio Guzmán López, hijo de Joaquín “El Chapo” Guzmán, comparecerá este viernes 11 de julio ante una jueza federal en Chicago, donde podría declararse culpable de uno o varios de los 22 cargos que enfrenta en Estados Unidos. Se espera que su defensa y los fiscales presenten un acuerdo que permitiría evitar un juicio con jurado y fijar una fecha para la sentencia.
El posible cambio de postura representaría un avance sin precedentes, ya que Ovidio es el primer integrante directo de la familia Guzmán en buscar un pacto con las autoridades estadounidenses. Su acuerdo podría reducir sustancialmente la condena, especialmente si colabora como testigo para desarticular redes del cartel de Sinaloa.
Los cargos que enfrentaría incluyen distribución de narcóticos (principalmente fentanilo), lavado de dinero, asociación delictuosa, tráfico de armas y otros delitos violentos. Si bien la audiencia formal es este viernes, ya se han señalizado las negociaciones y un “cambio de plea” (de inocente a culpable) en los documentos judiciales.
Autoridades federales de Chicago reprogramaron la audiencia de miércoles a viernes, manteniendo la reserva sobre los detalles del acuerdo. Además, la fiscalía ha retirado los cargos adicionales en Nueva York para concentrar el caso en Illinois.
Este movimiento corresponde a una estrategia contundente contra los “Chapitos”, la facción del cartel que Ovidio y sus hermanos lideraron tras la captura de su padre. Se considera que sus declaraciones podrían aportar información sustancial para futuras investigaciones, tanto en Estados Unidos como en México.
En caso de concretarse el acuerdo, Ovidio podría enfrentarse a una condena menor a la esperada, especialmente si se conserva el tiempo que ya lleva en custodia (más de dos años desde su detención en México en enero de 2023). También podría beneficiarse de protección en EUA, al cooperar con las autoridades.
