El exdirector General de Petróleos Mexicanos Emilio Lozoya acusó al expresidente Enrique Peña Nieto y a quien fungiera como su secretario de Hacienda y Crédito Público, Luis Videgaray Caso, de utilizar los sobornos de Odebrecht en la campaña de 2012 a fin de pagar las estrategias para golpear a los entonces candidatos Andrés Manuel López Obrador y Josefina Vázquez Mota.
El 8 de octubre pasado, Lozoya amplió la denuncia que presentó ante la Fiscalía General de la República desde el 11 de agosto pasado y en la que señaló a tres expresidentes, a Luis Videgaray y otros funcionarios y exfuncionarios de participar en actos de corrupción relacionados con la constructora Odebrecht.
Detalló que con los sobornos que la firma brasileña dio para financiar la campaña de Peña Nieto, el entonces coordinador Luis Videgaray ordenó pagar a asesores y analistas políticos, quienes debían entregarle directamente el resultado de su trabajo.
“Si bien los entregables referidos eran reportados directamente a Luis Videgaray Caso, tengo conocimiento de que básicamente se trataba de productos tales como encuestas electorales, diseños de estrategia de comunicación para golpear y desacreditar a los candidatos de la oposición, con especial referencia a Andrés Manuel López Obrador, aunque tuve conocimiento de que se incluía a Josefina Vázquez Mota”, señaló.
La ampliación de denuncia de Lozoya es una de las pruebas que tiene la FGR contra el también exsecretario de Relaciones Exteriores y el expresidente Enrique Peña Nieto en la carpeta de investigación FED/SEIDF/CGI-CDMX-
/0000- 865/2020, integrada por la Subprocuraduría Especializada en Investigación de Delitos Federales (SEIDF).
Hace unos días la FGR intentó judicializar la carpeta y solicitó orden de aprehensión contra Videgaray por cohecho, asociación delictuosa, delito electoral y traición a la patria, delitos por los que también señala al extitular del Ejecutivo federal.
Sin embargo, el juez de Control del Reclusorio Norte, Artemio Zúñiga, solicitó al Ministerio Público más datos sobre su acusación, y en lugar de desahogar el requerimiento, el fiscal encargado desistió de la petición para complementar la carpeta con mayores indicios.
En su ampliación de denuncia, Lozoya entregó comprobantes de los depósitos que Odebrecht realizó a través de una empresa fachada a Lobnek Wealth Management, que era la gestora de las cuentas bancarias de Latin America Asia Capital Holding y está ubicada en Ginebra, Suiza.
“Aporto una lista de los depósitos que realizó la empresa fachada de Odebrecht, Innovation Research, a la cuenta en el banco Gonet y que acreditan las aportaciones de Odebrecht a la campaña presidencial de Enrique Peña Nieto”, señaló.
También exhibió los estados de cuenta de depósitos hechos por Odebrecht a asesores electorales y pagos de servicios profesionales que iban dirigidos a él.
Para ocultar el origen de los recursos, Lozoya señaló que se simularon acuerdos firmados entre Odebrecht y Latin America Asia Capital Holding para realizar inversiones en minería y las facturas que se pagaron a asesores electorales no mencionaban actividades sobre la campaña, sino que hacían referencia a esos proyectos de minería.
“Escuché de Luis Videgaray Caso que otro modus operandi que utilizaba para financiar la campaña fue a través de la institución denominada Monex, sin que hubiere tenido conocimiento de detalles al respecto”, dijo.
Además de esto y de la declaración del propio Lozoya, la FGR tiene como pruebas las declaraciones de tres testigos más, dos de ellos excolaboradores del exdirector de Pemex; notas periodísticas, la investigación que Estados Unidos tiene respecto al caso Odebrecht, estados de cuenta de Suiza y hasta algunas publicaciones de redes sociales.
Una de las entrevistas referidas por la FGR es la de Miguel Pérez Esquivel, testigo ofrecido por Lozoya, quien era el chofer de Emilio Lozoya Thalmann, padre del exfuncionario federal.
“Yo presencié situaciones que de hecho derivaron y tuvieron una influencia significativa en el fallecimiento de mi amigo José Velasco Herrera [ex jefe de ayudantes de Emilio Lozoya Austin]”, declaró ante la fiscalía.
“[Velasco] me platicó que por instrucciones del señor Lozoya Austin seríamos responsables de recibir dinero en efectivo que sería entregado a funcionarios o legisladores del Partido Acción Nacional para que apoyaran la reforma del Pacto por México”.
El chofer de Lozoya detalló al Ministerio Público las distintas ocasiones que acudió a recibir dinero en efectivo en las oficinas de Montes Urales 425 para entregarlo a Rafael Caraveo, extrabajador del Senado de la República, quien fue exhibido en agosto pasado a través de un video en el que se le observa contando el dinero y metiéndolo en maletas.
En la solicitud para capturar a Videgaray, misma que fue retirada, la FGR afirmó que el extitular de Hacienda representa un riesgo para sus investigaciones en el caso Odebrecht.
“Existe riesgo de que el imputado pueda destruir, modificar, ocultar o falsificar elementos de prueba”, señaló la Fiscalía para justificar la necesidad de capturar al exfuncionario.
Debido a que se desconoce el paradero de Videgaray, la FGR planteó la posibilidad de solicitar a Interpol que se emita ficha roja para buscarlo en 194 países.
Argumentó que el delito de traición a la patria, por el que lo acusa, amerita prisión preventiva de oficio, lo que puede motivar al ex funcionario a mantenerse prófugo de la justicia.
Añadió que Luis Videgaray tiene facilidades para abandonar el país o permanecer oculto debido a su solvencia económica, a que su pasaporte está vigente y a la red de “excolaboradores, contactos y conexiones en el extranjero que le podrían auxiliar a salir”.
Fuente: EL UNIVERSAL