De acuerdo con los pronósticos de Copernicus, el Programa de Observación de la Tierra de la Unión Europea y del modelo de pronóstico meteorológico europeo ECMWF, a partir del martes 23 de junio se espera que polvo proveniente del desierto del Sahara ingrese al territorio mexicano, ¿esto debe preocuparnos?
El Centro Nacional de Prevención de Desastres (CENAPRED) explica que las concentraciones muy probablemente no afectarán a la población. “depende de la intensidad del viento y concentración de este sobre África”, sin embargo, la Sierra Madre Oriental es una barrera natural para que atraviese al centro del territorio.
Aunque el polvo tiene un efecto directo en la cantidad de nubosidad y lluvias y se ha observado que los vientos se incrementan por el fenómeno de “El Niño”, que actualmente tiene una fase neutra, normalmente no representa un peligro para la población.
Se prevé que el polvo entre por la península de Yucatán, ahora la nube de polvo del Sahara se encuentra sobre el océano Atlántico, frente a las costas de África, con dirección al mar Caribe, Centroamérica y posiblemente a México, de acuerdo con la imagen del satélite GOES 16.
Una de las principales características o indicios del polvo africano es que el día se torna grisáceo, los atardeceres rojizos y hay escasa nubosidad, ante ello se recomienda estar atentos a los avisos del Servicio Meteorológico Nacional y de la Coordinación Nacional de Protección Civil (CNPC).
En caso de que las concentraciones sean importantes, se pide evitar exponerse a las altas concentraciones de polvo, tomar resguardo durante estos eventos., cerrar todas las entradas de aire a los cuartos durante las tormentas, si es necesario estar a la intemperie, utilizar lentes y cubrebocas o pañuelo. Para las personas con enfermedades respiratorias crónicas (EPOC, asma), adultos mayores, mujeres embarazadas y niños deben usar protectores respiratorios tales como mascarillas o un pañuelo de tela húmedo para cubrir nariz y boca, además, cubrir las fuentes de agua como pozos, recipientes o estanques de almacenamiento de agua para evitar contaminación.
Fuente: https://www.eleconomista.com.mx