Monterrey— Los aranceles que la administración Trump impuso al aluminio y al acero ya están pegando a los productores de cerveza en Estados Unidos y analistas adelantan que encarecerán los autos en unos meses más.
En principio, señalaron, el impacto para México en estos productos se verá en los de importación desde ese país, pero después también se afectarían los de elaboración nacional.
En el caso de los autos, el año pasado se importaron 138 mil unidades desde Estados Unidos, que representaron 10 por ciento de todos los que fueron comercializados, de acuerdo con la Asociación Mexicana de la Industria Automotriz.
Por modelos, los más comercializados fueron la Grand Cherokee, la Escape, la Lobo Crew Cab, la Equinox SUV, el Civic 4 puertas transmisión automática, la CR-V, la Sorento y la Sienna, entre otros, según la Asociación Mexicana de Distribuidores de Automotores.
Ya de por sí, del 2015 al 2017 los precios de los vehículos nuevos en México acumulan un alza promedio del 15 por ciento, de acuerdo con el Inegi, y especialistas adelantan que en los siguientes meses se daría un aumento del 5 por ciento.
‘Armadoras no pueden absorber los incrementos’
“Es un hecho que las armadoras en Estados Unidos no pueden absorber todos los incrementos, no pensaría que estén aumentando los precios más del 5 por ciento, ése sería el rango que pudieran traspasar, sobre todo considerando lo competitivo que está el mercado mexicano”, apuntó Manuel Nieblas Rodríguez, socio especialista de la industria manufacturera en la consultora Deloitte.
Añadió que a raíz del alza que tendrán los vehículos importados, las armadoras en el país podrían elevar también sus precios en una proporción menor, para no afectar su participación de mercado.
Armando Soto, director de la consultora automotriz Kaso y Asociados, explicó que el golpe a los precios de los vehículos armados en Estados Unidos deriva del alto nivel de integración que tienen el aluminio y el acero canadiense y mexicano, que a partir de este mes también son gravados.
“El mayor costo por los aranceles no es sostenible, las armadoras de Estados Unidos van a tener que ajustar sus precios tanto para ese mercado como a nivel global, incluido México”, dijo.
Un reporte del Departamento del Trabajo de Estados Unidos sobre los precios a los que productores de acero y aluminio en ese país vendieron en mayo muestran que los aranceles ya están teniendo impacto.
Por ejemplo, las láminas de aluminio subieron 5.02 por ciento respecto a abril y 17.26 por ciento a tasa anual.
En el caso de los productos de acero de molino, éstos aumentaron 4.3 por ciento mensual y 10.5 por ciento anual.
Ayer, en declaraciones a la agencia Bloomberg, Gavin Hattersley, presidente de MillerCoors, se mostró muy preocupado sobre el impacto que está teniendo en las finanzas de su compañía el arancel del 10 por ciento al aluminio, material en el que se envasada el 56 por ciento de la cerveza que se vende en Estados Unidos.
“No puedo simplemente ir a los accionistas y decir: ‘Van a tener que aceptar que mis ganancias serán de 40 millones de dólares menos’. No funciona de esa manera”, indicó.
Las acciones de Molson Coors (tenedora de Miller) han caído 14 por ciento desde que Trump anunció planes de aplicar el arancel al aluminio.
Fuente: diario.mx