La pandemia de coronavirus ha provocado el aumento de agresiones físicas, embarazos por violación sexual, homicidios y suicidios en los niños mexicanos, advierte un estudio elaborado por el gobierno del presidente Andrés Manuel López Obrador.
“Lamentablemente, las condiciones de confinamiento, las restricciones a la movilidad, la suspensión y otros factores ha generado graves afectaciones en las niñas y niños de nuestro país”, expresó el subsecretario de Gobernación, Alejandro Encinas Rodríguez.
Estas afectaciones, dijo, se enfocan en las etapas de desarrollo y salud mental por falta de convivencia comunitaria y por segregación social, así como la afectación al proyecto de vida de niños y niñas por la deserción escolar y el incremento en la desigualdad, indicó.
“Un asunto muy delicado es el incremento en la vulnerabilidad ante la violencia familiar, el incremento de los homicidios infantiles y los embarazos en menores de edad”, alertó el funcionario federal en la conferencia mañanera.
El subsecretario de Derechos Humanos de la Segob, Alejandro Encinas Rodríguez, presentó el estudio denominado Impacto de la pandemia en niñas y niños, donde dijo que un primer dato está vinculado con la deserción escolar y exhibió dos indicadores.
El primero derivado de encuesta covid que realizó el Instituto Nacional de Estadística e Informática (INEGI), en donde señala que 5.2 millones de estudiantes no se inscribieron en el ciclo escolar 2020-2021 por causas relacionadas por el virus o por falta de recursos; de estos, tres millones son niñas y niños.
El segundo indicador es relativo a los datos del Sistema de Estadísticas Continuas de la Secretaría de Educación Pública (SEP), que se refiere a la población estudiantil matriculada en el ciclo escolar 2021, que alcanzó 35.6 millones de niñas y de niños.
Pero se registró una disminución significativa de 2.6 por ciento en educación básica, de 3.1 por ciento en educación media superior y del 0.8 por ciento en educación superior, indicó Encinas.
“Si bien el porcentaje más alto se da en educación media superior, lo delicado es que el mayor número de niños y niñas matriculados está en educación básica, tanto en primaria como en secundaria”, refirió el funcionario federal.
Luego, informó que uno de los elementos más delicados tiene que ver con el incremento significativo de la violencia familiar durante la pandemia, donde solamente entre los meses de marzo a junio del presente año se registraron los niveles máximos históricos de violencia familiar contra niñas y niños.
“Para dar un dato que es realmente preocupante, es cómo durante el primer semestre del 2021 se registraron 129 mil 20 carpetas de investigación por violencia familiar, que representa un aumento del 24 por ciento respecto al mismo periodo del año anterior”, señaló el subsecretario de Gobernación.
“Un asunto delicado, porque también hay que señalar que un gran número, si no es que la mayoría de las agresiones y violencias que se sufren en el hogar, no son denunciadas y a pesar de ello tenemos este incremento tan significativo”, indicó.
En el caso de las denuncias por lesiones, el 76 por ciento ocurrieron dentro del hogar y el 73 por ciento de los casos, la persona responsable de la agresión tenía algún parentesco con la víctima, señaló Encinas.
También, mencionó que el 81.6 por ciento de las víctimas por lesiones fueron niñas y jóvenes mujeres adolescentes, y durante el primer semestre de 2021 los casos por parentesco alcanzaron el 66 por ciento.
“Las niñas y adolescentes mujeres fueron las más violentadas dentro del hogar, con el 92.8 por ciento de agresiones vinculadas a violencia sicológica, violencia sexual, violencia física, abandono, negligencia y violencia de naturaleza económica”, alertó el subsecretario.
Este es un hecho, aseguró, que va vinculado también al problema de embarazo de niñas, niños y adolescentes.
De acuerdo con las estimaciones del Consejo Nacional de Población, actualmente nacen cada día más de mil bebés hijos de madres, niñas y jóvenes.
En 2020 se registraron 373 mil 661 nacimientos de madres adolescentes, de las cuales ocho mil 876 son hijas e hijos de niñas menores de 14 años, refirió.
Enseguida, mencionó el siguiente dato estadístico: “Niñas entre 10 y 14 años fueron embarazadas por un amigo, un familiar, un desconocido o el exnovio, la mayoría de estos casos por violación sexual o por matrimonios arreglados, que son violaciones sexuales”.
Luego, hizo referencia a datos del Registro Nacional de Población donde se indica que cuatro de cada 100 nacimientos en la actualidad son de niñas madres menores de 17 años, y lamentablemente, dijo, las defunciones por embarazo o parto en adolescentes mujeres de 15 a 17 años ocupa el sexto lugar en sus causas de muerte.
“Estos niveles de violencia alcanzan su expresión más delicada en los homicidios de niñas y niños. Solamente entre 2018 y el 2021 se han registrado cuatro mil 400 homicidios de niñas y de niños”, informó el subsecretario de Gobernación.
Dijo que, en 2020, la tercera causa de defunción de niños en el país es el homicidio de los niños y es la sexta entre las niñas, entre uno y los 14 años; en el caso de las adolescentes la primera causa de defunción es el homicidio, enfatizó.
Luego, señaló que desde 2017 se registran alrededor de mil 500 homicidios anuales y la tendencia, mencionó, se ha ido incrementando a partir de la pandemia en el año 2020.
Además, en 2020 hubo mil 100 suicidios de niñas y de niños, una cifra que no se había registrado anteriormente.
“La tasa de suicidios en niñas y niños y adolescentes aumentó en 12 por ciento entre 2019 y 2020, llegando también a su máximo histórico. Los suicidios de niñas y niños entre 10 y 14 años aumentaron en 37 por ciento para el caso de niños y 12 por ciento en el caso de niñas y mujeres adolescentes”, dijo y remató:
“Y lo más delicado, el pensamiento suicida en adolescentes aumentó del 5.1 al 6.9 por ciento del 2018 a 2020 y la conducta suicida se incrementó en adolescentes del 3.9 al seis por ciento de 2018 a 2020”, alertó Encinas.
Por ello, mencionó que la pandemia también ha impactado en el caso de la desaparición de menores de edad.
Actualmente, el gobierno federal ha registrado entre el primero de enero de 2020 y el 10 de agosto anterior, cuatro mil 325 niñas y niños desaparecidos en México, presumiblemente víctimas de la trata de personas.
“Lamentablemente, también en muchos casos el proxeneta tiene algún vínculo familiar o de parentesco con la víctima”, indicó.
Por eso, dijo que desde el ámbito de los derechos humanos y la protección del interés superior de los niños, el gobierno federal considera “urgente” abrir los espacios de convivencia y educativos que permitan que las niñas y los niños comiencen a resarcir las afectaciones por el confinamiento.
“El regreso a clases, sin lugar a dudas, es una medida preventiva importantísima. Las escuelas son espacios de formación, pero también de convivencia que permiten incluso prevenir y detectar los otros tipos de violencia de que son objeto las niñas y los niños”, consideró Encinas.
En este contexto, insistió en abrir los espacios públicos, las bibliotecas, los museos, las actividades deportivas, los cursos de verano, para fomentar este tipo de convivencia de la que han estado ausentes durante más de un año las niñas y los niños.
No obstante, señaló que, de forma paralela, se deben tomar las medidas preventivas, sanitarias, incentivando el cuidado comunitario y el autocuidado de las niñas y niños.
“Hay que hacer una cultura de autocuidados en la niñez de nuestro país para evitar la propagación del virus”, concluyó.
Fuente: https://www.proceso.com.mx/