En el marco del Foro de Cooperación Económica Asia-Pacífico (APEC), el presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, logra un acuerdo clave con su homólogo chino, Xi Jinping, para frenar el envío de precursores químicos utilizados en la fabricación de fentanilo. La histórica reunión, celebrada en San Francisco, California, marca un hito en la cooperación bilateral y aborda además temas de comercio, fabricación de vehículos, energías renovables y trenes.
La respuesta positiva del presidente chino a la insistencia de López Obrador llega después de una carta enviada en abril, en la que el mandatario mexicano expresaba la necesidad de combatir conjuntamente el tráfico ilícito de precursores químicos. El acuerdo incluye la creación de un grupo de trabajo México-China sobre precursores químicos y cooperación antinarcótica.
En un comunicado oficial, la Presidencia informó sobre la satisfactoria reunión, donde ambos líderes destacaron la importancia de intercambiar información sobre embarques que salen de Asia. Además, se resaltó el respaldo mutuo en situaciones de emergencia, como el envío de ayuda para los damnificados por el huracán Otis y la colaboración en la lucha contra la pandemia de COVID-19.
En el ámbito político, Xi Jinping elogió las reformas lideradas por López Obrador en México y reconoció la importancia de fortalecer el multilateralismo y el derecho internacional para abordar los desafíos globales. Ambos presidentes coincidieron en la necesidad de trabajar juntos por la paz mundial y rechazaron acciones unilaterales.
La reunión, catalogada como un diálogo “franco y amable”, refuerza los lazos entre México y China, siendo este último el segundo socio comercial del primero a nivel mundial y el principal en la región de Asia-Pacífico. La inversión extranjera directa de China en México ha alcanzado los 2 mil 161 millones de dólares desde enero de 1999 hasta diciembre de 2022.
Como muestra de la estrecha relación entre ambos países, el presidente López Obrador invitó a Xi Jinping a visitar México en los próximos meses, una invitación que el mandatario chino aceptó, consolidando aún más los lazos diplomáticos entre ambas naciones. La reunión concluyó con un optimista López Obrador, quien, al ser cuestionado por los medios, respondió levantando el pulgar y afirmó: “Muy bien, todo muy bien”.
