Luego de las declaraciones hechas por el presidente Andrés Manuel López Obrador y de Manuel Bartlett, titular de la Comisión Federal de Electricidad (CFE), sobre la corrupción y conflictos de interés en esa empresa, en donde se le involucra, el expresidente Felipe Calderón dijo que si tienen pruebas en su contra que las presenten, de lo contrario “que se callen”.
“Rechazo categóricamente que yo haya beneficiado a empresas extranjeras o mexicanas, si Manuel Bartlett o el propio presidente tienen pruebas de que yo haya beneficiado en particular a Avangrid o a cualquier empresa, que exhiban esas pruebas, sino que se callen”.
Y es que, durante la conferencia de prensa de ayer en Palacio Nacional, Manuel Bartlett, director de Comisión Federal de Electricidad, señaló a nueve exfuncionarios por conflicto de interés al tener una relación laboral con empresas del sector energético luego de dejar sus funciones, entre los que se encontraba el expresidente.
En entrevista con Pascal Beltrán del Río, para Imagen Radio, señaló que en lo que a él respecta, durante su administración actuó con legalidad y ética, por lo que dijo desconocer la situación de los otros involucrados, y los llamó a aclarar esta situación al tiempo que dijo “no mete las manos al fuego por nadie”.
Actué con absoluta rectitud, no solo legal, sino ética y no acepto que se me haga un señalamiento de este tiempo… No sé qué haya pasado con otras personas que mencionan, que se defiendan, porque también es importante que la gente diga su punto de vista que tiene y, sino que reconozca lo que haya hecho”.
Señaló que el empresario José María Riobóo Martín, “tiene intereses como particular, ha tenido contratos millonarios durante el gobierno de López Obrador, cuando fue jefe de gobierno y probablemente ahora, y hoy ya es uno de los principales asesores de López Obrador… ese sí es un conflicto de interés”.
Y agregó: “esta descalificación brutal hecha desde el poder a la Comisión Reguladora de Energía, no es más que el reflejo de una estrategia que es la de desaparecer todos los órganos independientes que puedan representar cierto contrapeso al poder absoluto que ahora él está acotando”.
El expresidente de México, dijo que estas declaraciones solo reflejan el desconocimiento y prejuicio que tienen respecto al sector energético, en las que según “las empresas públicas son buenas, las empresas privadas son malas y si son extrajeran, peor, las chupo el diablo”.
Ante esta situación, reiteró su postura de sostener una discusión “en público o en privado” con el presidente López Obrador, para debatir este y otros temas que tengas que ver con el sector energético y “con mi propia calidad moral”, por lo que celebró la convocatoria del mandatario federal que dijo: “que haya debate, que se trate este asunto que tiene que ver con el interés público, sin pelearnos”.
Fuente: AGENCIAS – EXCELSIOR