En pleno pico de la sexta ola de la pandemia, más de 34 millones de alumnos, de nivel básico a superior, regresaron a las aulas tras el periodo de vacaciones decembrinas.
Ante el incremento de contagios, en algunas escuelas se volvieron a instalar los filtros sanitarios, mientras que en al menos seis estados (Querétaro, Baja California, Nuevo León, Estado de México, Tamaulipas y San Luis Potosí) se impuso el uso de cubrebocas de manera obligatoria dentro de las aulas, y en dos más las clases presenciales se quedaron en pausa.
Aunque la medida sanitaria del uso de la mascarilla se decidió adoptar de manera forzosa en San Luis Potosí tras las vacaciones, el aumento de contagios en el estado impulsó que se decidiera llevar a cabo el regreso a clases de manera híbrida, al menos por una semana más, mientras que en Guerrero, a diferencia de las demás entidades, las clases se retomarán este 10 de enero debido a que los docentes no terminaron el Taller Intensivo.
De acuerdo con la Dirección General de Epidemiología, la positividad por COVID-19 se mantiene en 49.60 por ciento a nivel nacional, la cifra más alta de lo que va de la sexta ola; no obstante, hay entidades como Baja California (72.66 por ciento), Quintana Roo (70.30) y Veracruz (69.50 por ciento), donde el porcentaje estatal supera al de todo el país.
En tanto, hay estados como Tabasco, Yucatán, Coahuila, Sinaloa, Campeche, Tamaulipas, Sonora y Nuevo León, donde la tendencia de contagio alcanzó su máximo en la semana 50 o 51 y ya muestra una tendencia a la baja.
Alejandro Macías, ex comisionado de Salud, señaló que las escuelas son uno de los focos que más preocupó a la población en olas pasadas, pues un menor podía pasar el virus a toda la familia.