En un incidente alarmante, un grupo de hombres armados interceptó un autobús que transportaba a 31 pasajeros, incluyendo migrantes de diversas nacionalidades y mexicanos, en una carretera del estado norteño de Tamaulipas, cercano a Texas. Las autoridades estatales han confirmado el suceso, aunque aún se desconocen muchos detalles.
La Vocería de Seguridad de Tamaulipas está llevando a cabo una investigación sobre el secuestro que tuvo lugar la tarde del sábado en una carretera del estado. Entre los detenidos se encuentran hombres, mujeres y niños, según un funcionario estatal que no está autorizado para hablar con la prensa. Sin embargo, la proporción de personas de cada nacionalidad sigue siendo desconocida.
El autobús, de la empresa SENDA con el número 9570, partió del estado norteño de Nuevo León con destino a la ciudad fronteriza de Matamoros, Tamaulipas. La ciudad enfrenta problemas significativos debido a la aglomeración de miles de migrantes intentando cruzar de manera ilegal por el Río Bravo para llegar a Estados Unidos.
El incidente ocurrió en un poblado rural cercano a la ciudad de Río Bravo, donde un comando armado detuvo la marcha del autobús y se llevó a las 31 personas después de revisar la unidad. Hasta el momento, no ha habido comentarios de la Fiscalía General de la República ni del Instituto Nacional de Migración sobre el caso.
Este episodio revive la preocupación por la seguridad en la región, recordando un incidente similar en marzo de 2019. En aquella ocasión, individuos armados detuvieron un autobús de pasajeros en la carretera federal San Fernando-Reynosa, llevándose a 22 personas cuyo destino aún es desconocido. La frontera de Tamaulipas enfrenta desafíos de inseguridad debido a la lucha entre facciones del Cártel Del Golfo, extendiéndose a ciudades en el centro del estado, especialmente aquellas cercanas al Golfo de México.