El gobernador de Nuevo León, Samuel García Sepúlveda, recriminó a los estados la falta de apoyo ante la crisis que atraviesa su entidad por la escasez de agua.
Durante una visita al municipio de General Terán, aseguró que los estados “no mandan una chingada despensa” y “no levanta la mano nadie”. Sin embargo, dijo que no necesita esos apoyos.
“Y les digo algo, no los ocupamos; porque aquí sí sacamos debajo de las piedras el agua, el dinero y el orgullo, no ocupamos a nadie los neoleoneses y somos los que más lana producimos, somos los que más pagamos impuestos”, dijo ante los aplausos de los presentes.
“Pero les juro que esta crisis se va a superar pronto y vamos a exigir que nos respeten. Y no ocupamos nada de nadie porque aquí solos podemos”, enfatizó.
Previamente, había dicho que le llamaba la atención que los neoleoneses siempre que hay un temblor en la Ciudad de México, un huracán en Guerrero o una catástrofe en Chiapas, son los primeros “en juntar lana y pipas y mandar ayuda”.
Dijo que Nuevo León es el estado que aporta más recursos cuando hay una crisis: “Siempre somos nosotros. Y nos dicen codos”.
De acuerdo con el gobierno de Nuevo León, la crisis del agua que atraviesa la entidad se debe a una importante fuga en la presa ‘El Cuchillo’, que surte hasta el 40% del agua a la zona metropolitana de Monterrey.
Para reparar la fuga, los operarios cerraron el flujo del agua, dado que se trata de una compleja operación de ingeniería.
La semana pasada, la bancada del Partido Acción Nacional (PAN) en el Congreso de Nuevo León propuso que se adelante la entrada en vigor de la Ley de Revocación de Mandato para que el ejercicio ciudadano sea aplicado al gobernador Samuel García.
Los legisladores panistas presentaron una iniciativa que propone modificar la ley vigente, que establece que la revocación del mandato y demás disposiciones legales entrarán en vigor a partir del 5 de octubre de 2025, es decir, serán aplicables al próximo titular del Ejecutivo del Estado.