
Ciudad de México, México.- La presidenta del Senado de la República, Laura Itzel Castillo Juárez, promovió un pronunciamiento a favor de poner fin al embargo comercial, económico y financiero que Estados Unidos mantiene sobre Cuba, en un gesto de solidaridad con el pueblo cubano.
Durante la lectura del documento, la legisladora morenista destacó que la postura del Senado parte de los valores y principios de la política exterior mexicana, establecidos en la Constitución. “La Cámara de Senadores, en solidaridad con el pueblo cubano, se pronuncia a favor del levantamiento del embargo comercial, económico y financiero impuesto por los Estados Unidos de América en contra de la República de Cuba”, señaló.
El pronunciamiento también expresa que el Senado mexicano “acompaña la resolución aprobada por la Asamblea General de las Naciones Unidas”, la cual exhorta a las naciones del mundo a poner fin al bloqueo comercial y financiero impuesto por Washington desde hace más de seis décadas.
No obstante, la senadora Castillo Juárez firmó el mensaje sin que el pleno del Senado lo aprobara formalmente, por lo que el texto se considera una manifestación individual, aunque en sintonía con la postura oficial que México ha sostenido históricamente ante la ONU.
La iniciativa de la presidenta del Senado siguió al respaldo que el Gobierno mexicano brindó recientemente a Cuba en el seno de las Naciones Unidas, una posición que generó inconformidad en Washington.
El subsecretario adjunto del Departamento de Estado de Estados Unidos, Christopher Landau, expresó su desacuerdo a través de redes sociales: “Me entristece profundamente que países amigos, incluyendo nuestro primer socio comercial, perpetúen este mito y, por lo tanto, apoyen a una sangrienta dictadura caudillista que se ha afianzado en el poder durante el doble del tiempo que duró el régimen del General Porfirio Díaz”, escribió.
El embargo de Estados Unidos contra Cuba, vigente desde 1962, ha sido condenado año tras año por la Asamblea General de la ONU, donde la amplia mayoría de los países miembros votan a favor de su levantamiento, con el apoyo constante de México y otras naciones latinoamericanas.










