Claudia Sheinbaum, la próxima presidenta de México, afirmó que no permitirá que el país sea utilizado como parte de una campaña electoral, en respuesta a los recientes comentarios de Donald Trump sobre las negociaciones migratorias durante su mandato. En un mitin en Grand Rapids, Michigan, Trump recordó cómo amenazó al Gobierno mexicano con imponer aranceles para frenar la migración, afirmando que logró “todo de México”.
Sheinbaum subrayó la importancia de respetar la decisión del pueblo estadounidense, pero enfatizó que siempre defenderá la soberanía de México. “No permitiremos que se utilice a México como el elemento central de la campaña”, declaró, reafirmando la independencia del país en el contexto de las relaciones bilaterales.
Trump relató que durante las negociaciones sobre la construcción del muro fronterizo, exigió 28,000 soldados mexicanos para proteger la frontera. Aseguró que el entonces canciller mexicano, Marcelo Ebrard, accedió a la solicitud, lo que Sheinbaum consideró una distorsión de la realidad.
La presidenta electa también hizo hincapié en que México es un país libre y soberano, y que, aunque existe una relación amistosa con Estados Unidos, es fundamental defender los intereses nacionales en cualquier foro. Además, Sheinbaum pidió que no se malinterpreten las intenciones de Trump, quien ha expresado su deseo de mantener el tratado comercial entre Estados Unidos, México y Canadá, lo que, según ella, no afectará la inversión de empresas estadounidenses en México.
“Estoy convencida de que México seguirá recibiendo inversión”, concluyó, reafirmando su compromiso con la soberanía y el desarrollo económico del país.
