La presidenta Claudia Sheinbaum aseguró que no se protegerá a nadie involucrado en el robo o venta de combustible ilegal en México. Sus declaraciones se dieron luego del hallazgo de una refinería clandestina en Coatzacoalcos, Veracruz, donde se aseguraron 500 mil litros de crudo sin que hasta ahora se tenga registro de detenidos.
Durante su conferencia matutina, enfatizó que la investigación también evaluará si dentro del caso hay participación de funcionarios de Petróleos Mexicanos, recalcando que las indagatorias seguirán “hasta donde tope”. Esta refinería clandestina, operada de forma artesanal, requirió la intervención de inteligencia, vigilancia aérea y cateos autorizados por un juez.
Sheinbaum explicó que el procesamiento del combustible requiere conocimientos técnicos especializados, como los de ingenieros químicos, quienes podrían estar vinculados a la trama; sin embargo, será la investigación la que informe si existe nexo con Pemex. Además, señaló que trabajan en estrecha colaboración con la Fiscalía General de la República, la Guardia Nacional, la Aduna y la Secretaría de Seguridad para desarticular redes criminales dedicadas al huachicol.
Por su parte, la jefa del Ejecutivo subrayó la puesta en marcha de controles más estrictos en aduanas para bloquear el ingreso irregular de combustibles y permisos temporales que pudieran facilitar el comercio ilícito. El objetivo es no solo asegurar laboratorios clandestinos, sino también identificar y sancionar a los responsables, sin excepción.
Aunque se han asegurado grandes volúmenes de combustible en Veracruz y Nuevo León, aún no hay reportes de arrestos. La mandataria prometió que los operativos continúan y advirtió que nadie quedará impune si se comprueba su participación, enviando un mensaje claro de cero tolerancia al huachicol.
