La situación de violencia en Sinaloa se agrava, con recientes actos delictivos que han dejado un saldo trágico de más asesinatos, bloqueos de carreteras y tiroteos en la región. En los últimos días, se reportaron cinco muertes y múltiples incidentes que han conmocionado a la población tanto en la capital del estado como en áreas rurales.
En el centro de la sindicatura de Costa Rica, se hallaron los cuerpos de dos hombres con evidentes huellas de tortura y disparos. Los cuerpos estaban acompañados de sombreros y cartulinas con mensajes, lo que indica un posible ajuste de cuentas entre grupos criminales. Este hallazgo desató una violenta confrontación entre dos bandas rivales al salir de la sindicatura, en dirección a la carretera 19.
Durante este enfrentamiento, un convoy compuesto por el Ejército, la Guardia Nacional y Policías Estatales se encontró con civiles armados, lo que resultó en una larga persecución. En el caos, dos cuerpos desaparecieron del lugar, presuntamente llevados por miembros de uno de los grupos enfrentados.
Las consecuencias de este conflicto fueron trágicas, con tres civiles fallecidos. Un cuarto individuo, identificado como Ricardo “N”, quedó atrapado en un automóvil que chocó contra un árbol durante la balacera. Fue rescatado y trasladado bajo custodia a un hospital en la capital del estado.
En la misma zona, las autoridades aseguraron tres vehículos, dos de los cuales habían colisionado contra árboles. En su interior se encontraron armas y cargadores. Además, se brindó asistencia a conductores de veinte camiones de carga, así como a automovilistas cuyos neumáticos sufrieron daños por puntas de acero esparcidas en la carretera.
En un acto más de violencia, la carretera Culiacán-Imala fue bloqueada en la madrugada del lunes 6 de enero con tres camiones recolectores de basura pertenecientes al ayuntamiento. También se reportó el despojo de cuatro camiones urbanos, los cuales fueron recuperados sin daños por las autoridades.
En un operativo de reconocimiento en el poblado de Bebelamas, las fuerzas de seguridad aseguraron 115 máquinas tragamonedas, seis vehículos, 720 envoltorios de cocaína, 14 de cristal, cinco kilos de marihuana y 130 cartuchos útiles, evidenciando la magnitud de la actividad delictiva en la región.
