Tras denuncia de Lozoya, Calderón aseguró que Etileno XXI fue un buen negocio

 

El ex presidente Felipe Calderón, en entrevista con Ciro Gómez Leyva en su programa Por la Mañana, declaró que las acusaciones de corrupción documentadas en la denuncia de Emilio Lozoya son “un caso de persecución política en su contra. No tiene lógica más que alinear una acusación a los adversarios de López Obrador”.

La denuncia, hecha pública en un documento filtrado la tarde del miércoles, vincula al ex mandatario michoacano con la autorización del contrato entre Petróleos Mexicanos y la empresa Etileno XXI en 2010 y su posterior renegociación. De acuerdo con el testimonio del ex director de Pemex, en 2012, Felipe Calderón organizó una serie de reuniones con representantes de ambas empresas en Los Pinos. Esos encuentros supuestamente sirvieron para revaluar el contrato antes de la toma de posesión de Enrique Peña Nieto.

Etileno XXI es una empresa creada a partir de la asociación entre Idesa, compañía mexicana, y Braskem, una filial de Odebrecht. En 2018 el periodista Raúl OImos publicó una investigación donde documentó las condiciones del acuerdo entre Pemex y Etileno XXI. La empresa del Estado debía proveer al privado con 66 mil barriles diarios de etano y recibiría el pago con un descuento que durante años fue desconocido.

El etano es uno de los productos obtenidos durante la extracción del petróleo, la empresa propiedad de Braskem lo usaba como materia prima para la producción de diversos plásticos. El documento filtrado reveló que el descuento era del 25 por ciento del precio de mercado.

De acuerdo con la investigación de Olmos, el primer año de operación del contrato, 2016, Pemex percibió una pérdida de 935 millones de pesos. En 2018, la Auditoría Superior de la Federación recomendó a la empresa productiva del gobierno renegociar el contrato.

El análisis fiscal dictaminó que resulta inviable para la petrolera vender esas cantidades con ese descuento. En primer lugar, porque no produce suficientes barriles como para cumplir con la obligación, por lo que, desde 2016, Pemex importa etano. Y en segundo lugar, porque los gastos de la importación son mayores que los de la venta, entonces hay una pérdida importante en el negocio que el contrato fijó por 20 años.

Las condiciones anteriores fueron fijadas durante el gobierno de Calderón, aunque entraron en vigor en el sexenio de Peña Nieto. Las acusaciones no sólo involucran al ex presidente, también mencionan al entonces secretario de Energía, José Antonio Meade, quien presionó la aprobación del contrato en 2011. En un reportaje de Aristegui Noticias, Sebastián Barragán describe como el ex candidato a la Presidencia tuvo reportes de las pérdidas que representaría el negocio con Etileno XXI, pero los ignoró.

En la entrevista con Gómez Leyva, Calderón aclaró que la denuncia no menciona ningún soborno para su persona, que los funcionarios de Odebrecht nunca han mencionado su nombre. Explicó que el tema de Etileno XXI es un caso de “política pública, discutible, pero que en su momento estuvo bien analizado por gente muy competente”.

Dijo que no hubo descuentos por debajo del precio del mercado y que fue un negocio lógico ya que el precio del etano es menor en las zonas de producción como Tabasco y Veracruz, donde tenían lugar las transacciones. Aseguró que si Pemex perdió la capacidad de cumplir con las demandas del contrato, fue por la mala administración bajo el periodo del mismo Lozoya.

Además, se refirió a la ausencia de simpatizantes obradoristas en la denuncia. Para el ex mandatario, este hecho demuestra que la denuncia es una herramienta política para perseguir a la oposición del presidente. Además, aseguró que su victoria electoral en 2006 fue “limpia” y que percibe un rencor en su contra por eso.

Fuente: AGENCIAS

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