Los gobernadores y el Gabinete de Seguridad Federal, encabezado por el secretario Alfonso Durazo, cerraron filas y establecieron un solo frente para enfrentar la situación de violencia que afecta al país.
Tras la tensión generada por la exhibición de los mandatarios faltistas a las mesas de seguridad en los Estados, la Conferencia Nacional de Gobernadores (Conago) y el Ejecutivo federal acordaron anteponer la neutralidad política y trabajar de la mano para fortalecer la Estrategia Nacional de Seguridad Pública impulsada por el Presidente Andrés Manuel López Obrador (AMLO).
“Acordamos tener reuniones bimensuales regionales de seguimiento y caracterizar las estrategias con los componentes a los que nos obliga la incidencia criminal local”, precisó Durazo.
El gobernador de Michoacán, Silvano Aureoles, quien preside la Comisión de Seguridad de la Conago, remarcó que pactaron hacer prevalecer el principio de unidad en torno a los grandes problemas que aquejan al país y mejorar los mecanismos de coordinación interinstitucional.
“Reconocemos que nuestro país atraviesa por un momento decisivo en materia de seguridad. La paz y el garante de seguridad y justicia, que tanto anhela y demanda el pueblo de México, son una obligación que nos compete a todos los órdenes de Gobierno y a la propia sociedad. Por ello, ratificamos nuestro compromiso de coadyuvar para al desarrollo integral del país anteponiendo el interés de la nación”.
Por su parte, el gobernador de Jalisco, Enrique Alfaro, remarcó que fue una reunión larga “en la que abordamos muchos asuntos; entre ellos, el funcionamiento de las reuniones de los consejos estatales de seguridad”.
Y acentuó: “La verdad es que los resultados que hoy se entregan para cada uno de los Estados del país, a nosotros nos hacen ver que vamos como lo hemos expresado, que vamos avanzando y que hay resultados muy positivos”.
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