Tratado de Aguas con EU no es venta: SRE


La Secretaría de Relacione Exteriores (SRE) aseveró que Estados Unidos no le comprará agua a México toda vez que el acta 323, recién firmada, no lo autoriza.

Los gobiernos de México y Estados Unidos recién firmaron una nueva acta que se integra al Tratado de Aguas Internacionales entre ambos países: la 323, en donde se asienta que a cambio de ayuda económica que la Unión Americana proporcionará para el desarrollo de infraestructura hídrica en territorio mexicano, podrá obtener ciertas cantidades de líquido.

El acta 323 denominada Ampliación de las Medidas de Cooperación y Adopción de un Plan Binacional de Contingencia Ante la Escasez de Agua en la Cuenca del Río Colorado, fue negociada —a decir de ciertos sectores— sin una difusión previa y solicitar la opinión de quienes podrían verse afectados.

“Los Estados Unidos contribuirán con un monto total de 31.5 millones de dólares a México a través de la Comisión (CILA), para desarrollar proyectos de conservación en México. Toda el agua generada o conservada con esta inversión será asignada a México con excepción de los siguientes volúmenes: 86 millones de metros cúbicos de agua para cumplir con el compromiso de Estados Unidos para beneficio del medio ambiente, en particular el tramo limítrofe y del Delta del Río Colorado”, quedo escrito en la nueva acta.

“Literalmente, Estados Unidos está comprando agua. Este país entrega 31.5 millones de dólares para la presunta inversión en infraestructura del lado mexicano, pero es para recuperar agua. Pero esa agua es mexicana porque está en nuestro país. Ellos retendrán una buena cantidad de millones de metros cúbicos, el acta lo precisa, y luego hacen un lavado de cara, dicen que será para uso ambiental en el Río Colorado. Utilizando eufemismos, es una compra literal de agua mexicana”, consideró José Zavala, investigador de El Colegio de la Frontera Norte (Colef).

A esto, la dependencia federal presidida por Luis Videgaray respondió que “el Acta 323 no autoriza la venta de agua ni afecta los derechos de los usuarios, ya que sólo posibilita la participación de los mismos en un programa de conservación de agua a partir de mejoras en su infraestructura de riego de manera voluntaria”.

Manifestó que los 31.5 millones de dólares que la Unión Americana otorgue a México para infraestructura, es para aquellos módulos de riego que de manera voluntaria desean realizar inversiones para mejorar (en sus parcelas, módulo o distrito de riego) y no cuentan con los fondos para esto.

“Gracias a ello, pueden acceder a los recursos mediante el intercambio temporal de una parte del volumen de agua que tienen concesionado, sin afectar ni comprometer sus derechos a futuro.

“Esto se incluyó en el texto del acta con el único propósito de preparar a los usuarios del Valle de Mexicali y San Luis Río Colorado para enfrentar potenciales condiciones de escasez. De esta manera, los usuarios hacen más eficientes sus sistemas de riego y cultivo, de forma tal que en una eventualidad en la que se disponga de menos agua puedan continuar sembrando la misma superficie y, bajo condiciones normales, la puedan incrementar”, justificó Relaciones Exteriores.

La Cancillería expuso que la negociación del acta 323 tomó casi cinco años en los que se llevaron a cabo 109 reuniones y consultas con los diferentes usuarios y dependencias.

Fuente: https://www.informador.mx

Salir de la versión móvil